Un regalo de Sergio Astorga

martes, 25 de mayo de 2010

Rotura del tercer sello: Vasco-Aragonés



"No hay dos sin tres" dice el refranero. De nuevo las Variaciones se visten de gala por un nuevo libro que no un libro nuevo, ya que su andadura va pareja con el año. Pero el tiempo vuela y no nos perdona que lo ignoremos, de forma que se venga de tanto en tanto haciéndose de rogar y escamoteándonos su presencia. Vamos, que hasta ahora no he podido terminar de leerlo y hacer una presentación acorde al esfuerzo invertido en su creación. Es lo menos que se merece.

Como habrán deducido del primer párrafo, es uno de esos libros para mí especiales. Ya anuncié hace algún tiempo su existencia y hoy lo traigo aquí, en primer lugar por méritos propios y porque además éstos le pertenecen a un amigo. Vds. lo conocen, se llama Charles de Batz. Hace ya casi tres años que nos seguimos en este mundillo particular de la blogosfera. Tenemos amigos en común como Anarkasis o Isabel Romana (ya saben, la autora de Dido...), por citar los más conocidos de los asiduos a esta bitácora. Nos apreciamos, nos admiramos, compartimos muchos gustos y espero y deseo que dentro de quince días podamos finalmente "vernos las caras".

Aquí está pues su primer hijo en papel. El otro, el que apenas levanta tres palmos del suelo, corretea desde hace tiempo por los pasillos de un hogar del País Vasco haciendo las delicias de sus progenitores y obligándolos "de paso" a correr detrás de él los 20 kms. marcha.





"El conde de Fuentes. Vida, prisiones y muertes de Armando Pignatelli"

¿A que suena bien?.. Pues sabe mejor.

No es una novela histórica aunque se la beberán como tal. Es una biografía veraz y fidedigna de un personaje que vivió en uno de los momentos más apasionantes de la historia de España y Francia, a caballo entre la Edad Moderna y la Contemporánea. Y es el resultado del trabajo de investigación durante años de dos personas: José Antonio Beguería Latorre, de Zaragoza e Ignacio Perurena Borobia (nuestro Charles), de San Sebastián.

694 notas a pie de página, 7 necesarios apéndices, 31 archivos y bibliotecas públicos y privados visitados, 178 referencias bibliográficas, un trabajo exhaustivo en 5 publicaciones periódicas, 504 nombres en su índice onomástico de los que 19 son Pignatelli. ¿Quieren que siga con las cifras? Tengo más. Lean, lean. Un árbol geneaológico, una dedicatoria doble (estoy segura de que bien merecida, que las parejas suelen sufrir tanto o más que los autores la concepción, embarazo y alumbramiento de un libro), dos breves notas biográficas de los padres de la criatura y un ex-libris cuyo lema hace referencia precisamente a esa autoría dual y que les muestro muy gustosa:




Menudo historial, ¿verdad? Pero no se me asusten lo más mínimo. Se lee en dos zancadas, tres si sus piernas no son muy largas (como es mi caso) o son Vds. de natural algo indolente (que también). Es un delicia de texto, se lo aseguro. Las notas a pie de página no les reducirán ni un ápice la tensión de las intrigas que se tejen y destejen en torno a tan singular personaje. Estoy en condiciones de asegurar que les apasionará. Se enamorarán del duque de Fuentes. No tengan ningún miedo en emprender su lectura. Les costará trabajo dejarla para ir a dormir y lamentarán llegar a la página 389. Doy fe de ello.

De entre toda de esa larga lista de números y referencias citados anteriormente, creo que solo me ha faltado por mencionar uno: la cita. Y ésta, de Voltaire, dice: "Qui n'a pas l'esprit de son âge, de son âge a tout le malheur". En traducción algo rápida y libre, "Quien no posee el espíritu de su tiempo, de éste sufrirá todo su infortunio" Y el olvido de la misma ha sido premeditado pues me sirve para hacerles un breve bosquejo de nuestro protagonista ya que ésta se ajusta como el zapatito de cristal de Cenicienta a nuestro don Armando de Pignatelli, grande de España.

No voy a destriparles las venturas y desventuras de tan singular aristócrata. Pero baste decir que en su primogenitura se reunieron dos de las casas nobles más importantes e influyentes, tanto por parte francesa como por parte española. Sería absurdo que les mencionase sus títulos nobiliarios. Lo atrayente del personaje no está en ellos, salvo por lo que su posesión representaba en cuanto a poder, influencias, estudios, conocimiento. Lo irresistible de él es que caminó prácticamente toda su vida a contracorriente y se topó de bruces con un destino absurdo y también,
desde mi punto de vista, injusto.

Enormemente culto, rico, de excelente familia, ilustrado. Hasta bello. Criado en la Francia prerrevolucionaria del amor por la Ilustración, los salones, la música, el laissez-faire y el savoir-vivre, en la casa de París o de Bruselas de la rama francesa de su familia con la que terminó de educarse, seguramente escucharía sonar música como ésta:


N.Chédeville (1705-1781) - Sonata para flauta dulce y bajo continuo, nº1 en Do Mayor. IV Allegro, en la suite "Il pastor fido". Grupo Zarabanda. Álvaro Marías, director y flauta dulce. Alain Gervreau, cello y Rosa Rodríguez, clave. Warner, 2005


M.Marais (1656-1728) - Sarabande à l'espagnol. Paolo Pandolfo, viola da gamba. Diverdi-El País, 2004


F.Couperin (1668-1733)- Le Parnasse o L' Apothéose de Corelli. Corelli, tras su entusiasmo, queda dormido. (muy dulce). William Christie y Christophe Rousset, clavecín. Harmonia Mundi, 1988



Hijo de padres distinguidos que se preocuparon de su educación y la de sus hermanos. Con alguna que otra herencia familiar negativa en forma de tuberculosis o locura. Vividor, puesto que se lo podía permitir pero amigo a un tiempo de personajes muy atractivos de su época en el terreno de la literatura, la música, la política o el pensamiento filosófico. La rama de los Pignatelli que "emigró" como embajadora de los Borbones a Francia conocía algunas de los artistas más prodigiosos de su época. Será precisamente su abuelo, Joaquín Pignatelli de Aragón y Moncayo, el primer protector de Francisco de Goya y el que traería a España al compositor de estas piezas:


L.Boccherini (1743-1805)- Seguidillas: Los españoles se divierten por las calles de Madrid, de "La música nocturna de Madrid". Orquesta de la RTVE. Dir.: Enrique Asensio. RTVE, 2004


L.Boccherini (1743-1805)- Quinteto para guitarra y cuerdas nº9 en Do Mayor, G453 "La Ritirata de Madrid" Variaciones I a XII, maestoso e lento. Conjunto de Cámara de Saint Martin-in-the-Fields. Dir.: Lorin Maazel. Pepe Romero, guitarra. Philips, 1980


L.Boccherini (1743-1805)- Concierto para cello en si bemol mayor -II Adagio. English Chamber Orchestra. Dir.: Maud Martin-Tortelier. Paul Tortelier, cello. EMI, 1973



Absolutamente leal a aquellos miembros de su familia que lo criaron o con los que se crió y que le quisieron y a los que quiso mucho, objeto de respeto por parte de aquellos otros que pertenecían a otros bandos, generoso con sus criados fieles, no voy a contarles por qué ni por qué no, de repente, aparece en España en los primeros meses de 1808 ya que les gustará descubrirlo por Vds. mismos. Pero baste decirles que en aquella época, un afrancesado (en cualquiera de sus acepciones aunque en unas más que en otras) lo tenía francamente difícil, aunque como en el caso de nuestro en cierto modo antihéroe, intentase que este país saliese del atraso, la desidia y las luchas fratricidas en que los ineptos Borbones lo tenían sumido. Armando de Pignatelli y Egmont no tenía el espíritu carpetovetónico de una de sus ramas y el infortunio y la desgracia de su tiempo cayeron implacables sobre él.



Compren el libro, siéntense en un sofá cómodo, pongan música ad hoc y déjense llevar por la escritura de Ignacio y José Antonio y si, como yo, son destacados ignorantes de este período de la historia de España y Francia, aprenderán y entenderán perfectamente "lo que pudo haber sido y no fue".

De todas formas, hay otra razón más que me ha llevado a hacer esta entrada. Verán...

Yo me hice adicta (y digo bien y con conocimiento de causa) a
Ex Oriente Lux (como se llamaba entonces el blog de Charles) precisamente cuando estaba publicando una serie de entradas relativas a una pequeña y preciosa caja de madera que Luis, el padre de Armando, había mandado confeccionar a Baradelle como juguete y material de estudio para sus hijos. Cajita con la que probablemente nunca llegaría a jugar el hermano pequeño de Armand, Constante.

Les recomiendo que antes de leer el libro, se aproximen a esta entrada de Tornavientos y lean cuidadosamente bajo el epígrafe
Baradelle. Los enlaces contenidos en ese término les llevarán a las historias que él confeccionó para nosotros sus lectores con mimo y cuidado. A Vds. también les engancharán. Lo sé. A mí me tuvieron enredada con los Pignatelli y con el maestro artesano francés durante al menos un par de meses.

Tirando y tirando del hilo, esa cajita con su tesoro de juegos




me llevó a mí a otro Baradelle original y mucho más cercano. Y de ahí a un museo antiguo con vitrinas de cristal y madera y suelos de parqué brillante y sonoro bajo las pisadas, con maquetas enormes de barcos y cuadros decimonónicos de gran formato. Y allí me estaba esperando, sobre un terciopelo desvaído, el regalo sorpresa impagable del mapa de Juan de la Cosa... y la música casi coetánea que parecía escucharse al contemplarlo:


F. Caroso (1526/1535 - 1605/1620)- Gagliarda di Spagna. Pro Musica Hispaniarum. Dir.: Roberto Pla. EMI (Hispavox), 1993


Il Gran Desio e la Dolce Esperanza. Unica A del Cancionero El Escorial. IV.A.24. Poesía y música en tiempos de Colón. Il gran desio e la dolce esperanza fol. 22v-24r. Speculum. Dir.: Ernesto Schmied. Pepe Hernández y David Sagastume, contratenores. Comunidad de Madrid, 2006


C. Negri (c. 1535 - c. 1605- Spagnoletta o Lo Spagnoletto. Pro Musica Hispaniarum. Dir.: Roberto Pla. EMI (Hispavox), 1993


... Pero esa es ya otra historia.



Gracias Charles, por el placer de la lectura y el conocimiento de tu Pignatelli. Y a todos Vds., gracias también por la paciencia demostrada en una lectura tan larga.

Buenas noches y sean todo lo felices que puedan.


14 comentarios:

Txema dijo...

Cara Condesa

Nos estamos seguros de que se trata de un texto valioso y, por tanto, apreciamos y agredecemos profundamente la recomendación de su lectura, que prometemos llevar a efecto en cuanto la servidumbre de nuestras banales ocupaciones diarias, que nos permiten subsistir, nos lo permitan.

afectuosamente, su más ferviente admirador

Freia dijo...

Mi estimado caballero

Compruebo que a Vd. también le aqueja el mal de la escasez de tiempo y su premura.
No crea que mis ocupaciones son menos banales que las suyas. Esto es y traducido al román paladino y sin que sirva de precedente: que yo también curro, aunque ni me lo agradezcan ni lo cobre. Y hasta el mismísimo tupé estoy de tener que hacerlo.

Dicho esto y recuperando las formas y el polisón, le diré que no es mala lectura para las vacaciones de verano que se aproximan.

Suya afectísima,

RGAlmazán dijo...

Querida condesa, sus sugerencias son para mí: órdenes. Así es que no hay más que decir, apenas termine mis estudios juveniles, haré una inmersión en este libro tan bien presentado por Su Ilustrísima.
Lo dicho, noblesse obligue. Ya le comentaré.

Salud y República

Txema dijo...

Hacemos votos y elevamos preces para que sea reconocida a su persona el esfuerzo que realiza y recompensado como tenemos seguro que se merece.

Y en cuanto a D. Kabi, también nos congratularemos gozosos de que pueda disfrutar de tan elogiada obra en el tiempo menor posible.

queden en paz

Charles de Batz dijo...

Querida amiga,

quedo enormemente agradecido por la hermosa y elegante -no podía ser de otra manera-, reseña que haces del libro. Lo he pasado realmente bien leyéndola, acompañado de esa selección musical que, como las que acostumbras a hacer, dan en el clavo. Los imagino escuchando aquellas obras, quién sabe si dirigidas o interpretadas por sus propios creadores. Quién sabe...

Yo tampoco se que decir después de leerle. Me he sentido tan agradecido que quizá baste con que te diga que muchas gracias por cada una de tus palabras.

Salud, querida amiga, y hasta muy pronto.

anarkasis dijo...

Es realmente duro nacer Pignatelli, no sé si lo hubiera podido soportar...

Izaskun dijo...

Querida condesa, tan espléndida es la reseña que nos brinda que me da cierto pudor aproximarme al libro. Lo harñe con tiempo, espero. Y por ahora me quedo con la belleza por usted otorgada, a la que volveré para oír la música que hoy no toca.
Un abrazo,

Freia dijo...

RGAlmazán

Mi estimado Rafael. Estoy segura de que sus estudios juveniles acabarán en cum laude. Y sé que le gustan los estudios de historia. Estoy segura de que será un buen libro para este verano.
Espero que el color púrpura se haya tornado en rosáceo y que Vd. y su consorte disfruten de la primavera en Kabila.

Un abrazo fuerte

Txema

Mi estimado caballero. Jajajaja, ¿querrá creer que me cuesta acostumbrarme a leerle con este discurso tan versallesco?
Lo del trabajo mío no está sujeto a salario fijo, con lo que tampoco afortunadamente pueden rebajármelo (no hay mal que por bien no venga). Digamos que está relacionado con una de las obras de misericordia, pero un tanto contra mi voluntad. ;-pp

Cuídese mucho y y reciba un fuerte abrazo, suya afectísima (más ;-pp)

Charles

Mi buen Charles. Nada de agradecimientos. Disfruté mucho cuando supe de este libro por fin en circulación y todavía más cuando lo leí. Me entusiasmó. Todavía tengo en mi memoria los textos sobre los Pignatelli y Baradelle y todo lo que me aportó, incluído el que vinieran a descubrirme el museo Naval, tan cerquita y tan de camino al Prado.
La ide para la primera pieza de Boccherini vino directamente del recuerdo de ella en su blog por aquella época. Y del resto, sabe que compartimo amor y gustos por todo lo francés. El resto vino solo. A Vd. y sus Pignatelli y su Baradelle le debo el haber descubierto el mapa de Juan de la Cosa. Nunca se me olvidaré.
Espero que Donosti nos reúna en un café dentro de unos días.
Un abrazo muy fuerte y gracias a Vd. por su libro.

Anarkasis

Mi querida querida. Mi querida, Anarkasis. Efectivamente, creo que con tu manera de ser, nunca te habrías adaptado a ser un Pignatelli, pero puedo imaginarte perfectamente como bailarina de la Ópera de Paris, yavestruz...
Jajajaja. No te falta razón, pero yo prefiero haber llegado a mi edad provecta de más de cien años sin haber pasado por el tramo final de nuestro buen Armando. Es lo que tiene la aristocracia en tiempos revueltos...
Te debo un libro y un par de visitas. ¡Ah, y una foto porno del Museo Arqueológico.
Un beso muy fuerte, querida.

Izaskun

Mi querida Izaskun. Siendo Vd. como es toda una historiadora estoy segura de que este libro le iba a encantar e iba a sacar mucho más provecho de él que cualquier otra persona (fuera pudores, que en su caso son especialmente innecesario). Y quizá fuera un acicate y un aliciente para desempolvar de ese cajón su tesis terminada e intentar que vea la luz. No es mal momento, se lo aseguro.

Espero que sus quehaceres y proyectos sean los que le impiden escuchar la música. Regrese Vd. cuando quiera para oírla, que ésta es su casa.

Un beso muy fuerte, Izaskun

Txema dijo...

Pues como no quiero causarle esfuerzos innecesarios, aparcaré el tratamiento versallesco por uno más "campechano", como el de quien usted ya sabe, pues no en vano es condesa.

Quedo a sus pies, mi excelsa dama.

Freia dijo...

Jajajaja.
Y yo a los suyos, mi estimado amigo.

Isabel dijo...

Con esta forma de presentar las palabras de sus amigos ¿quién puede resistirse?

Mil besos

Freia dijo...

Yo espero que Vd. no lo haga, mi querida Costurera. Verá como se le quitan esos males menores que últimamente la maltratan un poco.

Un fuerte abrazo, Isabel. Y gracias por el esfuerzo de venir hasta aquí a dejar sus palabras.

ana dijo...

Pues en una pequeña libretita queda anotada tu recomendación. Pronto llegará el verano...

Un abrazo. Me ha encantado tu reseña.

Freia dijo...

Querida Ana, ya verás como te va a encantar.
Un beso a las dos