Un regalo de Sergio Astorga

martes, 3 de junio de 2008

Y de nuevo, Bach

Esta mañana he recogido de la FNAC un disco (realmente, dos discos y un DVD) que había encargado hace semanas. Llevo toda la tarde escuchándolo una y otra vez.

¿Una versión más de las suites para cello solo de Bach?

No, qué va. En cuanto suene la música se darán cuenta de que no es otra versión parecida a otras muchas anteriores.

Las suites de Bach representan, y se ha repetido hasta la saciedad, la cumbre de la música escrita para cello. Son puro esqueleto, pura y desnuda estructura musical, que esconden sin embargo bajo su armazón una fuerza vital impregnada de ritmo y melodía. Difíciles, muy difíciles. Hermosas. Perfectas. El cello se pliega a la música y añora, canta. Acostumbrado a ser "bajo continuo" y soporte de otros, el más bello instrumento de cuerda y con el sonido más parecido a la voz humana, es esta vez protagonista total y adquiere con esta partitura libertad plena.

Y en las manos de este cellista francés Jean-Guihen Queyras de 38 años, el instrumento fabricado por Gioffredo Cappa en 1696 pero con un montaje plenamente moderno, es capaz de regalarnos increíbles matices. No soy especial entusiasta de los instrumentos de época o historicistas (¡qué mal se adaptan a veces las palabras a los conceptos representados!), pero tampoco me considero detractora; no lo soy. Dichas versiones son importantes para intentar acercarse al sonido real de la época, para saber cómo sonaría una determinada pieza en pleno barroco, por ejemplo. Es digna de respeto y tiene mérito notable la tarea de investigación realizada por músicos, (instrumentistas y directores), muchos de ellos también musicólogos, para dar a conocer versiones originales (el término se queda de nuevo corto). Debo confesar, sin embargo, que me suelen gustar más las interpretaciones realizadas con instrumentos modernos. Son más elaborados y perfectos técnicamente, con lo que admiten modulaciones y riqueza de sonido de la que carecen sus "antepasados" barrocos, renacentistas o medievales. En la versión que traigo hoy, el instrumento moderno se agradece especialmente. Queyras, que durante años ha tocado con cellos barrocos, nos ofrece ahora toda la plástica musical que sólo un instrumento de esas características puede generar.

Y su interpretación es delicadeza, expresión, elegancia y sentimiento en su justa medida, pero también firmeza, sobriedad y un absoluto rigor interpretativo. Y es también una gran precisión técnica. Así, esta obra maestra del repertorio del cello adquiere, aunque parezca mentira, matices nuevos en una interpretación respetuosa y al tiempo renovada y fresca. No es fácil que un intérprete relativamente joven aúne maestría técnica y pathos a partes iguales y con generosidad. Queyras es capaz y lo demuestra.

Me ha gusto mucho la audición; mucho. Pero lo que yo pueda decir se queda corto, de modo que les he traído imagen y sonido para que juzguen (mental o emocionalmente; eso es cosa suya) por Vds. mismos.

La grabación de imagen fue realizada por Benjamin Krieg en marzo de 2007, en la iglesia protestante de St. Cyriak de Sulzburg (Bade-Wurtemberg). Queyras interpreta el Preludio y la Allemande de la suite nº 3 - BWV 1009. He encontrado este vídeo en youtube y a él me remito por aquello de que esta condesa cree firmemente en los derechos de autor y subir alguna grabación a Internet siempre le crea un cierto remordimiento. Tengo que confesarles sin embargo que si no lo hubiese localizado ya manufacturado, yo misma lo habría editado y subido con estas manitas porque, dado el precio que me han cobrado por el producto original, les aseguro que me siento con la autoridad moral suficiente como para colgarlo en la red y que mis amigos puedan disfrutarlo.





Tras la vista, el oído. El registro sonoro se realizó en igual fecha y lugar, para Harmonia Mundi. Aquí les dejo la grabación de la suite nº 6, BWV 1012. Como no he sido capaz de decidirme entre la Courante y la Zarabanda, les dejo las dos; así contentamos a los de alma ligera y a los de espíritu solemne.






[Novedades en Boomp3 y no sé cuánto durará. Si se accede a la página a través del enlace que les dejo en el reproductor de esta entrada, se puede descargar la pieza o canción desde la red]

Después de la tarde musical y de este artículo, les aseguro que me marcho a dormir relajada, tranquila, con buen ánimo... y ¡tarde, muy tarde!

Que la música de Bach mañana les ilumine y serene el día.

Buenas noches.

17 comentarios:

Joseba M. dijo...

De momento, me quedo con la Courante. De momento... Sólo las he escuchado dos veces. Es genial para dibujar gatos traviesos de buena mañana....
Besotes.

Freia dijo...

Jaja Joseba. Me gusta esta nueva aplicación de la courante. Si te fijas, cuadra bien con la inquietud y la curiosidad de los ojos de Rascayú y con él mismo: los gatos zascandilean por entre medias de las cosas sin tirar ni romper nada y a increíble velocidad. Al oír la pieza, casi casi se puede ver a Rascayú curioseando inquieto, abriéndose a las cosas, mirando con asombro.

RGAlmazán dijo...

Y tan tarde querida condesita. Trasnocha usted mucho. Cuídese. en cuanto a Bach, una maravilla. El viejo peluca nunca defrauda.
La verdad es que no sabría con cuál quedarme. Mejor con las dos. Nos vemos el sábado.

Besos, Salud y República

Cósimo dijo...

Lo escuché todo muy temprano, mientras comenzaba mi trabajo, antes de tiempo esta mañana, y ha sido la mejor manera de atenuar el pequeño fastidio de las prisas y los madrugones... Bach para mí es tan familiar, tan común y , almismo tiempo, tan grandioso. Gracias condesa

Martine dijo...

Ma jolie petite Comtesse,

Y despues de estos preciosos regalos para los sentidos que nos dejaste a altas horas de la madrugada... tu as pris le temps de venir prendre un thé à la menthe en ma compagnie, que de confidences échangées...

Mille baisers sur chacun de ces accords!

Anónimo dijo...

Una música maravillosa para sustituir una también maravillosa siesta. Como el efecto que me ha producido es el mismo que si hubiera pasado un rato con Morfeo (relajación y laxitud absolutas), dejaré para luego el comentario más profundo. Y guerrero, por supuesto.

Beso su mano.

Naveganterojo dijo...

Pero mira que te llega a gustar esta musica,en cambio yo no acabo de cojerle el gusto,pero en cambio a la dueña del blog, la debo mucho.
Gracias de nuevo amiga mia.

Duende dijo...

interesante, espero puedas asesorarme,que queria grabarle a mi sobrino de 3 meses musica clasica para que la escuche,la que me gusta a mi ,aun es joven
un beso

Antonio Rodriguez dijo...

Freia
Me quedo con la versión courante, te anima más a la actividad. La sabarande es mejor para después de un dia de mucha actividad y relajarte en casa tomando una copa.
Aunque las dos son muy buena.
Salud, Repúbica y Socialismo.

Antonio Flórez dijo...

¡Joé, doña Freia, me deja usted patidifuso con lo del pathos! Yo no usaría el término ni siquiera a las dos y media de la madrugada (hora, por otra parte, muy frecuentada por mí al ordenador, lo cual se nota durante el día después, ¿verdad?)

Un saludo y un hasta muy pronto.

Freia dijo...

Gracias a todos por esperar mi "retrasada" respuesta.

Rafa

Hay días en que a las 12 me caigo de sueño y otros en que me dan las tres con los ojos como platos... Ya sabes... las hormonas...jeje. Así que cuando me toca imaginaria, aprovecho.
Nos vemos el sábado.

Cosimo

Viniendo de alguien que sabe de música clásica mucho más que yo, aunque sea bien discreto al respecto, es toda un halago su comentario.
Espero que el trabajo le deje respirar de vez en cuando los mejores aires del año, los de junio.

Selma

Ma chèrie. Te debo un par de visitas, aunque debo decir como desagravio que la receta del tabboulé a Mariano le quedó de cine, gracias a ti. Espero poder tomarme un té en tu jaima mañana o pasado.
Mil besos

Herr Wörterbuch

Mein Lieber. Me alegro de que la música produca en Vd. efectos tan sedantes y agradables. Cuidado con la oreja, que se le va a plegar de un momento al otro.

Navegante

¡Qué alegría! Espero que si aún no van las cosas viento en popa, al menos las velas estén ya infladas y con rumbo a un montón de proyectos e ilusiones. Estoy segura de que sí. Gracias por tus palabras. Para mí siempre es un placer visitar tu barco y embarcarme contigo.
Te advierto que se aceptan peticiones del oyente, y no necesariamente de música clásica. Ya sabes, si te animas, intentaré complacerte. Un abrazo especial.

Duende

En primer lugar, gracias por tu visita y siento el retraso. Con relación a la grabación de música para un bebé, te diré que es difícil seguir un criterio: hay gustos muy variados: mi hermana le ponía a mi sobrino música de Wagner y milagrosamente no le han dado ganas de invadir Polonia como decía Woody Allen, jeje.
En general, te aconsejo que empieces por cosas suaves, alegres y conocidas: bastantes cosas de Mozart (serenata nocturna, algún concierto de piano sencillo, cosas de la Flauta Mágica como la canción de Papageno), el primer movimiento de la Pastoral de Beethoven, alguna gymnopedia de Satie, la sinfonía de los niños de Leopoldo Mozart, alguna sinfonía de Haydn. Les suele gustar mucho, los tranquiliza y les hace sentirse bien. Si tienes problemas para localizar la música, dame un toque al correo electrónico de la bitácora y hablamos.

Antonio Rodríguez

Espero verte el sábado, el plan courante o en plan zarabanda, como más te apetezca.

AF

Jajaja Antonio. Lo del pathos ya sabes que forma parte de los pedantorrilla que puede llegar a ser la condesa (yo no) de vez en cuando. Ya, ya sé que publicas y andas por la blogocosa hasta altas horas de la madrugada. No sé cómo puedes levantarte al día siguiente; al fin y al cabo yo no curro.
Te veo el sábado sin falta.

Un abrazo a todos

Anónimo dijo...

Pues no, la oreja plegada no. Bien abierta para escuchar la música que nos ofrece. Eso si, el nene se me quedó como un bendito con la Sarabande. Mano de santo. O mano de condesa, no se. Que tome nota Duende.
Sin quererme meter donde no me llaman, bueno si, queriéndome meter, decirle a Duende que en las tiendas de artículos para bebés y nenes pequeños, suelen vender unos discos con nombres como "Música para bebés" "El mejor relax para tu bebe" y cosas así, que merecen bastante la pena. En casi todos ellos vienen las cosas que te recomienda muy sabiamente la condesita.
Se suponía que iba a dejar un comentario guerrero y con ganas de polemizar un poco, pero la cosa está difícil. Mi estado de ánimo esta relajado y mi espíritu sereno. Cinco maravillosos soles acompañados de una pléyade de estrellas negras sobre un cielo crema han logrado que hoy sea un día de esos que no se olvidan jamás.
Pero claro, si me pongo tonto y no le doy un poco a la condesita, sus ínfulas, infulas e infulás no va a haber quien las aguante. Así que voy a lo mío.
Dice usted, señora condesa (pitití pititesa): "Debo confesar, sin embargo, que me suelen gustar más las interpretaciones realizadas con instrumentos modernos. Son más elaborados y perfectos técnicamente, con lo que admiten modulaciones y riqueza de sonido de la que carecen sus "antepasados" barrocos, renacentistas o medievales". Vale, bien. Ahora las preguntas. ¿Cuando Bach (o cualquier otro) compone su obra siglos atrás, lo hace pensando que en el futuro los instrumentos tendrán otra sonoridad? ¿Piensan en que Luis Cobos hará un remix con sus obras o que Mike Oldfield las usará para una banda sonora? ¿O las compusieron pensando en los instrumentos de su época y en las interpretaciones de los músicos del momento? Para mí que lo último, pero vaya usted a saber. Cuando uno es un genio lo mismo hasta compone pensando en el futuro (Luis Cobos incluído).

Beso su mano.

Freia dijo...

Herr Wörterbuch
Vengo de su página. Acabo de votar; espero que el voto sea convenientemente manipulado, aunque las preguntas objeto de sufragio me parecen un poco parciales y subrepticias. A mí me habría encantado otra que dijese:

- ¡Oh sí, más, más...! Necesito otra dosis de culebrón lúdico-festivalero... (a mí me encanta tu saga y no me he sentido identificada con las preguntas de la votación)
Es que mira que te quieres mal... Si nos encanta a todos la serie... menos a ti que te está costando un dolor. Tú no te preocupes que tenemos tiempo hasta enlazar con el del año que viene. Los puedes ir trufando a lo largo del año; quizá así el parto te resulte menos doloroso.
(creo que voy a copiar este párrafo anterior en tu blog). Lo copio, vamos.
Volviendo al tema...
No creo que el viejo peluca tuviera dotes adivinatorias, jajaja. Efectivamente lo creaba para los instrumentos de la época. Por eso conviene escuchar, desde mi punto de vista, de vez en cuando, versiones con instrumentos de la época (yo ayer escuché una integral de las sonatas para violín y continuo op. 5 de Corelli con arpa, clave, cello y violín barrocos) y salí del auditorio flotando); es decir, versiones "historicistas". Sin embargo, eso no es incompatible con que la música "gane" con instrumentos más modernos que aquéllos para los que fue creado. Las variaciones Goldberg nacieron para clave pero a mí, particularmente, me gustan mucho más las interpretadas al piano. Permite mucho más juego sonoro, más matices entre el piano y el forte. ¿Por qué no aplicar la técnica para mejorar lo ya existente?. Por esa misma razón prefiero escuchar un CD a un disco de fonógrafo o de vinilo (reconozco que ahora me molesta mucho el ruido de la aguja o el arrastre de la cinta de cassette). Quizá las primeras versiones sean más auténticas, pero no necesariamente suenan mejor (siempre desde mi punto de vista). Tampoco se canta ahora igual que se cantaba en época de Buxtehude: la invención de nuevas técnicas vocales hace que se pueda llegar con mayor facilidad, belleza y sonoridad a ciertos tonos en los que antes la mayor parte de los cantantes "calaban" (es decir, llegaban al máximo de sus posibilidades y pasaban al falsete o directamente no lograban subir más; todavía pasa mucho), lo que convertía dichas obras en poco o nada representadas debido a la dificultad. Siempre he pensado que cuando la técnica puede mejorar algo, sin adulterarlo, bienvenida sea. De todas formas, afortunadamente, ahora podemos escuchar ambas versiones siempre que queramos y no deja de ser un logro. El auge de las versiones historicistas ha propiciado también la mayor solicitud de contratenores, por ejemplo, que antes estaban prácticamente olvidados (aunque en este caso también haya tenido como contrapartida que cada vez hay menos contraltos, para mí la tesitura de voz más hermosa que existe).
Anda que vaya rollo que se ha soltado la condesa. Te advierto "Wörter" que eso va a alimentar sus infulás.
Besos

Anónimo dijo...

Después de tan larga e ilustrativa explicación solo me resta como réplica una frase muy breve.

Pues vale.

Pero claro, entrar en su salón solo para eso aparte de una estupidez me parece una perdida de tiempo. Así que seguiremos enredando un poco.

Lo que entendí, mi querida condesa (pitití pititesa) es que usted prefería las versiones realizadas con instrumentos más modernos. Es más, no es que lo entendiese yo, es que lo escribió usted. Pero lo mismo ha sido una jugarreta técnica que le ha hecho su ordenador y se le ha desconfigurado el teclado. A mi me ocurre bastante a menudo y he de reconocer que luego uno no ve como suyo lo que ha escrito. Así que tema zanjado.
Es más, esta vez le voy a dar la razón en una cosa. Comparto su opinión de que sus variaciones Goldberg son más "escuchables" interpretadas al piano. De hecho la grabación que poseo de esa obra es una interpretación (o la interpretación) de Glenn Gould que no tengo ni idea de que año es. Un día de estos lo miro y ya se lo diré. Ahora me niego a bucear en cajas y cajas de cedeses.

Y nada, alimente usted sus ínfulas pero no se olvide de alimentar su espíritu. Que no solo de ínfulas vive el hombre.

Beso su mano.

Freia dijo...

Herr Wörterbuch (pititig,pititug),
me está Vd. creando un auténtico complejo de expresarme mal. A ver si siendo tajante, me explico:
Que no tengo inconveniente en escuchar versiones historicistas de vez en cuando (sobre todo si se trata de Harnoncourt, Herrewege, Jacobs o Leonhart), pero que me gustan MUUUUCHO MÁS las interpretadas con instrumentos modernos o bien antiguos pero fabricados a la moderna. ¿Queda claro? Snif, snif,
De las Variaciones Goldberg tocadas por Glen Gould existen dos versiones de referencia, aunque no son las únicas (existe al menos una de 1959, en el festival de Salzsburgo, que ha tenido menos difusión): 1955 y 1981. La segunda es ya una Digital Recording que diría un essssperto, pero yo me quedo con la primera. En el perfil de mi bitácora encontrará el Aria de la de 1955 y en el vídeo que aparece también a la derecha, en la columna podrá ver y escuchar la de 1981. Son muy distintas. Juzgue Vd. mismo, aunque tampoco tiene por qué.
Creo que ya he alimentado bastante el espíritu por hoy, así que me voy a tomar un tentempié hasta que llegue la hora de comer.
Quedo a sus pies Sr. Conde (pititín, pititonde)

Gemma dijo...

Llego tarde a esta entrada, que me ha parecido deliciosa. Mis disculpas por adelantado.

No sabía que el cello fuera el instrumento más cercano a la voz humana ni tampoco que hubiera partidarios de interpretaciones historicistas ni modernas, así que ya puedes hacerte una idea de lo mucho que he aprendido hoy. ;-P

En cuanto al vídeo, alucinante.
Lo que no he sabido dilucidar es si tengo un alma ligera o un espíritu solemne, pues lo cierto es que ambas me han parecido igualmente estupendas. (También yo soy una enamorada de Bach, de su genio y música sublimes.)

Un fuerte abrazo

Freia dijo...

Disculpas a ti Mega. Leí tu comentario y lo dejé para comentarlo más tarde, pero se me traspapeló.
Si, yo he oído o leído en algún sitio que es el más parecido a la voz humana y, para mí, el que mejor puede interpretar la melancolía: creo que el cello es melancólico y triste por antonomasia. Es mi instrumento favorito quizá, junto con el oboe, por las mismas o parecidas razones.
Sí que existen los partidarios de las versiones modernas y de las historicistas, aunque me parece un debate y una controversia tramposa. Al igual que, por mucho que Santamaría se empeñe, no hay cocina tradicional pura enfrentada a cocina tóxica creativa moderna, no hay versiones historicistas puras o modernas más perfectas. Hay cocina buena y mala y música buena y mala, en uno y otro campo. Y punto.
Es probable que unos días te levantes con el espíritu ligero y otros, con el alma solemne. Es que somos así de complejos...
A mí también me gusto el vídeo; salvo por el precio, es fantástico.
Jajaja, reconóceme Mega que tú también tienes una vena filogermánica de tercera o cuarta generación.
Un besazo